Se inicia la segunda semana del mes de diciembre, y la última de actividades en la Casa de Representantes antes de irse al descanso de fín de año.  Pero lo que NO descansa es el afán de la comunidad inmigrante de seguir en pie de lucha por una Reforma Migratoria, y la expectativa de la comunidad en general para ver que giro van tomando los acontecimientos.

En la ciudad de Bakersfield, CA, los activistas continúan con su campaña “Los 11 Días por los 11 Millones”, frente a las oficinas del congresista Kevin McCarthy, donde se ha instalado  una mesa para registrar votantes.  Y como una de las principales actividades a realizar, está el de informar a los votantes acerca de la falta de acción por parte del congresista McCarthy en lo relacionado a la Reforma Migratoria. Las oficinas del congresista han sido cerradas a los activistas y eso ha encendido aún más el afán de lucha.

Y es que se llega ya el tiempo de que los congresistas salgan a su descanso (este viernes 13 de diciembre), y hasta el momento ni siquiera programada se encuentra una votación por la Reforma, apesar de que fuera ya aprobada por el senado desde el pasado mes de junio. Mientras perdure esta inacción de parte de los congresistas, continúen las deportaciones, continúen separándose las familias, y el sistema siga roto como hasta la fecha, no es sorprendente que en todos los puntos del territorio estadounidense sigan surgiendo acciones para presionar al Congreso a que le dé a la Reforma Migratoria la importancia que en realidad tiene, y que no sigan posponiendo la votación por más tiempo.

Los demócratas y algunos republicanos en favor de la Reforma han dicho que están seguros de contar ya con los votos necesarios para aprobar la reforma, y el presidente ha dicho que la firmará cuando llegue a su escritorio, y por ello la comunidad en general no entiende el porqué de la demora en la votación.