Mi futuro es lo que me motiva a luchar por la reforma migratoria porque hay muchas cosas que quiero hacer. Quiero poder solicitar ayuda federal y programas financieros sin preocuparme por mi estado. Quiero poder vivir la vida sin el temor constante de que me deporten. Quiero que otros puedan reunirse con familias que no han visto en años, incluso décadas. 

Con la ayuda del Congreso y sus votos, nuestros legisladores pueden darles a los Dreamers ya los trabajadores agrícolas el sueño americano. Un sueño que esta gente desea desde hace tanto tiempo. Los trabajadores agrícolas trabajan muchas horas en todos los climas para mantener a sus familias y llevar productos a las tiendas. Es hora de retribuir y agradecerles por sus sacrificios. Los soñadores solo conocen los Estados Unidos y este es su hogar. Algunos de nuestros Dreamers sirvieron en la pandemia y arriesgaron sus vidas para proteger a los demás. Un simple sí puede cambiar toda su vida. 

La inmigración nos impacta porque vivimos con el temor constante de que nos deporten solo por entrar a una tienda. 

Si Se Puede